Cuando llegaron todo había acabado, secaron sus lágrimas para
ver que por fin había una rendija de posibilidades por la que podían salir y
comenzar a luchar. Encontraron un pequeño hueco a través del cual se miraron y
vieron más allá de la imagen que ofrecían a simple vista. Esa sería la primera
vez que cruzaran sus miradas verdaderas. Sus rostros lánguidos, cetrinos,
opacos, casi mortecinos, denotaban cuan infelices habían sido sus pasados.
Fueron demasiados años intentando descifrar por separado el desamor que ocupó
sus juventudes. No lograron entender que su anterior destino había sido la
espera infeliz, afortunadamente hoy convertida en dicha. Definitivamente
comprendieron que todo había cambiado, que sus corazones por fin latían al
unísono y que su destino era bien distinto.
Me ha gustado mucho María Luisa. Sigue así.
ResponderEliminarUn abrazo.
Votada!!
ResponderEliminarme he leido los otros relato tambien y me han encantado!!!!
Sigue asi porfa
Mila
muy bueno :)
ResponderEliminarPrecioso Marisuki!
ResponderEliminarVotado
ResponderEliminarMuy bueno niña no sabia d esta faceta tuya.Enhorabuena
ResponderEliminarMuy bien, sigue así, eres una caja de sorpresas...
ResponderEliminarme han encantado
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